El dolor en el talón, o talalgia, es debido en la mayoría de los casos a la fascitis plantar popularmente conocida como espolón, aunque no necesariamente tiene que haber una espina ósea provocando el dolor.
¿Cómo se trata?
La mayoría de los casos se resuelven en unos meses con tratamiento conservador que consiste en el empleo de medidas como el reposo, analgésicos antiinflamatorios, modificación del calzado o plantillas que se combinan de distintas formas según las circunstancias.
En casos que no mejoran, suele ser necesario el tratamiento con infiltraciones, que son inyecciones en el pie. Suelen ser eficaces aunque a veces han de ser repetidas.
En ocasiones el dolor no cede a estos tratamientos, entonces podría ser necesaria una operación.
Otros motivos
Hay otros motivos para el dolor en el talón que, si bien son menos frecuentes, han de ser tenidos en cuenta a la hora de curarlos, ya que pueden requerir otro tipo de tratamiento:
· La sobrecarga mecánica, en ocasiones por atrofia de la grasa del talón, que consiste en la perdida de la almohadilla grasa que amortigua los choques que se producen al caminar.
· La compresión del nervio tibial posterior, que pasa por detrás de la parte interna del tobillo y puede quedar atrapado originando dolor en el talón